Llum BCN 2023 del 3 al 5 de febrero



Todos los meses de febrero, el Poblenou se ilumina durante tres noches de excepción para ensayar distintas maneras de imaginar la ciudad del mañana. El festival de artes lumínicas Llum BCN, una de las citas más importantes del calendario cultural de Barcelona, reunirá una vez más a decenas de miles de vecinos y vecinas en calles y plazas, alrededor de las intervenciones de creadores de todos los ámbitos: del arte contemporáneo al diseño o la arquitectura, y de la tecnología al diseño de iluminación.

Cada edición de Llum BCN es una gran fiesta ciudadana. También es un experimento colectivo de percepción y participación y un laboratorio urbano en el que exploramos cómo podríamos contemplar y habitar nuestro territorio compartido, la ciudad, desde nuevas perspectivas inéditas. 

Un evento que mira a nuestro entorno más próximo no puede ignorar las crisis más inmediatas que nos acechan, como la que ha cambiado nuestra relación con la energía, ni las grandes crisis de fondo, como la climática. A través de los proyectos del festival se plantean respuestas a estos retos colectivos, con nuevas herramientas y maneras de hacer. Las propuestas de esta edición plantean nuevos iconos urbanos postcarbono energéticamente autosuficientes, como Another Moon del colectivo coreano Kimchi and Chips, una “segunda luna” que flotará sobre el parque Central del Poblenou dibujada por láseres alimentados exclusivamente con energía solar. El holandés Thijs Biersteker, uno de los artistas europeos que más eficazmente está usando tecnologías para producir nuevos imaginarios para la transición energética, convoca al aire en We Harvest Wind, una escultura cinética interactiva alimentada por fuerzas eólicas.

El aire que flota sobre Barcelona será también el escenario en el que se sitúen otros proyectos del festival, como Atmospheric Lighthouse, una visualización en tiempo real de todo lo invisible que contiene la atmósfera de la ciudad y que convertirá la piel completa de la Torre Glòries en una gran veleta. A pocos metros, en el DHUB, Abel Korinsky y Orhan aib” Kavrakoglu presentan Call Out, una gran matriz de luz que traza el rastro de los satélites que, en ese mismo momento, cruzan el cielo de Barcelona varios kilómetros por encima de nuestras cabezas.

La escena global de las tecnologías creativas y las nuevas materialidades de la luz son siempre protagonistas en cada edición de Llum BCN. Este año participan por primera vez nombres ascendentes, como el diseñador de iluminación Nick Verstand con su escultura reactiva *Anima*, o los franceses Colectif Coin,con una minimalista intervención cinética a gran escala en el campus de la Universidad Pompeu Fabra. Clásicos locales como Playmodes regresan en esta edición, interviniendo y redescubriendo un espacio-elemento rehabilitado: la linterna de L’Auditori de Barcelona. La comunidad artística de la ciudad también está representada por nombres como Pedro Torres, artista brasileño residente en Hangar, y, por supuesto, por las diecisiete escuelas participantes de arte, diseño y arquitectura de la ciudad, que vuelven a realizar sus intervenciones en todo el territorio Llum BCN.

La celebración, como factor aglutinador de comunidad y expresión de identidad compartida, centra el trabajo de una de las protagonistas de esta edición, la artista británica de origen hindú Chila Kumari Singh Burman, figura clave del movimiento British Black Arts de los años ochenta. Su proyecto Liberty and Light cubrirá Can Framis de esculturas de neón que se han producido localmente gracias al trabajo cooperativo de dos entidades de economía social del Raval: Tot Raval y Impulsem.

Además, la dimensión más festiva y celebradora de Llum BCN se dejará sentir por todo el Poblenou en intervenciones abiertamente lúdicas, como los enormes inflables inmersivos de Architects of Air, y el street artmonumental del madrileño SpY, una estrella internacional en esta escena.

Finalmente, como cada edición, Llum BCN reivindica algunos nombres esenciales para entender la historia y los antecedentes de las artes lumínicas en todas sus formas y lenguajes. Tras rendir tributo anteriormente a artistas como Julio LeParc, Eugenia Balcells o Antoni Miralda, este año el reconocimiento adquiere una forma especial: la del diálogo entre generaciones, que une a dos artistas separados por más de cincuenta años de edad.

La fundamental artista visual Vera Molnar es una de las pioneras del arte realizado con ordenadores y desde los años sesenta del siglo XX ha sido una influencia clave sobre cada generación de creadores que han querido imaginar una estética algorítmica produciendo imágenes con código informático. A sus 98 años de edad, Vera Molnar participó por primera vez en la más reciente Bienal de Venecia, uniéndose a muchas otras mujeres recientemente incorporadas y reclamadas por los nuevos relatos de la historia del arte. Desde 2020, Molnar ha establecido un diálogo creativo con el creador francés Joanie Lemercier —participante en la edición 2019 de Llum BCN—, uno de los maestros contemporáneos del arte algorítmico. Esta conversación y complicidad se plasma en dos obras que presentarán por primera vez en esta edición de Llum BCN: una proyección pública de gran formato, realizada por Lemercier en homenaje a principios e ideas del trabajo de Molnar, y una pieza nueva de proyección y láser realizada conjuntamente por ambos artistas, que podrá verse en el vestíbulo del DHUB.